Urbanismo táctico: planificar ciudades con la participación activa de sus habitantes
Las comunidades, sus necesidades y su forma de habitar los espacios son los pilares del urbanismo táctico. Este concepto ofrece herramientas eficaces de transformación que mejoran la calidad de vida en las ciudades. Te contamos cómo implementarlo.

Debido al rápido crecimiento urbano que se vive globalmente, es cada vez más frecuente incluir a las personas en la planificación de las ciudades. De esta manera, los espacios públicos se renuevan gracias a obras locales que promueven el bienestar común. Así funciona el urbanismo táctico, un concepto que propone la transformación de los lugares de manera colectiva y colaborativa, con cambios a pequeña escala que generan impactos positivos a largo plazo para la población.
La participación social es el principal elemento de este tipo de acciones, pues los habitantes son actores experienciales que tienen la capacidad de proponer soluciones prácticas a problemáticas puntuales. De esta forma, sus aportes se convierten en la nueva configuración de las urbes.
¿Cuáles son los beneficios del urbanismo táctico?
De acuerdo con el artículo Urbanismo táctico: 3 ventajas en la ejecución de proyectos en las ciudades publicado en el blog Ciudades Sostenibles, del Banco Interamericano de Desarrollo, existen tres ventajas principales al ejecutar proyectos de este tipo:
- Bajo costo
En comparación con los planes de construcción convencional, los valores de la ejecución en el urbanismo táctico están muy por debajo del promedio gracias a acciones conjuntas y al uso de materiales reciclables y de bajo costo. Además, permite el financiamiento abierto en el que pueden participar actores públicos y privados.
- Mayor velocidad de ejecución
Por ser planes diseñados y ejecutados a baja escala, la velocidad de realización aumenta y permite la evaluación de los resultados en corto tiempo, lo que garantiza su vigencia y permite que las construcciones resultantes correspondan a las necesidades actuales de la población.
- Planeación participativa
La apropiación por parte de las comunidades hace que las intervenciones de estas estrategias cobren sentido. Aunque en ocasiones resulte difícil llegar a acuerdos, los proyectos tácticos hacen más viables las posibilidades de socialización, demostración y adaptación de las necesidades de la ciudadanía
Claves para implementar el urbanismo táctico
El urbanismo táctico es una herramienta que busca entregar a los habitantes espacios públicos que permitan mejorar su calidad de vida y, según Abril Santos, autora del artículo Urbanismo táctico: medio para promover alternativas de movilidad peatonal publicado por la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana, es interpretado desde el campo de la planeación bajo el siguiente esquema:
- Comprender la situación a partir de la definición del problema y la ubicación de la necesidad.
- Observar a los usuarios para involucrarlos de forma activa en la toma de decisiones.
- Definir alternativas de ejecución para contar con diversas opciones.
- Implementar las acciones definidas de intervención.
- Poner en práctica los aprendizajes continuos para corregir las posibles dificultades encontradas.
- Prototipar el proyecto para llevarlo a escena a mayor escala.
Cada vez son más las ciudades que siguen avanzando en la construcción de espacios que fomenten el bienestar común. Con soluciones innovadoras, las intervenciones locales se convierten en referencia para una planificación metropolitana. En la siguiente infografía conocerás tres ejemplos de ciudades donde el urbanismo táctico dio solución a desafíos puntuales y se convirtió en una experiencia que involucra a toda la población.
*Estos datos, tomados del Banco Interamericano de Desarrollo y la Facultad de Arquitectura Xalapa de la Universidad Veracruzana, son informativos y no obedecen a recomendaciones del Fondo Inmobiliario Colombia.